¡La vida! una obra la cual no admite ensayos... donde se vive una atmósfera apocalíptica. No hay sentido alguno para vivir, y sin embargo, luchan por existir.
¿A qué viene ese capricho?
¿A qué viene ese capricho?
Con una fuerza inútil siguen caminando por carreteras desoladas,
llenas de árboles marchitos,esqueletos humanos contemplándolos
desde los sitios más oscuros, infestados de voces...
llenas de árboles marchitos,esqueletos humanos contemplándolos
desde los sitios más oscuros, infestados de voces...
se sigue caminando ¡Incansables! ¡Almas valientes!... pero vaya, cuéntame de un valiente y te contaré una tragedia. Todos de una u otra manera buscando un sentido al propio sinsentido, a diario, cada día.
Quizá alguien tenga un buen plan, o quizás no y seamos como la esperanza de un niño
que siente perderlo todo...
que siente perderlo todo...